Su trabajo: El servicio doméstico.
Su mayor anhelo: Hacer bien su trabajo y llevar el sustento para su hogar.
La rutina comienza a las 4 de la mañana, hora en la que se levanta para preparar el desayuno y el almuerzo para los hijos, arreglarlos y llevarlos a la escuela, y después, salir a tomar un transporte en el que gasta dos horas para llegar a su lugar de trabajo; el hogar de su jefa, quien la está esperando antes de las 8 de la mañana para poder llegar a su oficina, cumplir con su labor y llevar, también el sustento para su hogar.
El menú del día está en una hoja pegada a la nevera. La labor es realizada con cada detalle así como le ha explicado la señora de la casa que debe hacer cada cosa. Se llega el final del día y con éste, el pago del trabajo en efectivo porque ese es el arreglo al que llegaron, ya que solo va una vez por semana a trabajar.
La jefa a quien respeta y admira es directora de compras en una empresa de lácteos que cada vez que puede le regala leche, queso y yogures para que lleve a casa y comparta en familia, así como la ropa en buen estado que ya no usan sus hijos.
Ya son 6 años de trabajo en casa de esta familia que para las fechas especiales siempre le dan un buen detalle. Cierto día que la señora de la casa no pudo ir a su oficina porque el niño de 3 años está resfriado y quiere atenderlo ella misma, se detienen a conversar y llegan a la conclusión que tienen los mismos sueños: ver un día a sus hijos felices y realizados, darse otra oportunidad para el amor y tener unas vacaciones en las que no muevan un dedo.
No es común este tiempo de conversación entre ellas, ni tampoco la vida que han vivido, mientras una ha pasado de las aulas de la universidad a una prestigiosa compañía a liderar un equipo de trabajo, la otra por falta de estudio y de oportunidades, vio en el servicio doméstico un proyecto de vida.
Sin embargo, esta relación laboral ha generado unos lazos de afecto y respeto que apenas en la empresa tuvo un ascenso, decidió pensar en su empleada doméstica que seguramente también estaría buscando mejorar su condición laboral.
Es así como la empleadora después de asesorarse de varios conocidos y amigos encontró a SYMPLIFICA, una plataforma virtual que la asesora en la formalización de dicha relación laboral y que a su vez, la lleva a dignificar y reconocer la labor de otra mujer que tiene un rol importante en la sociedad.
Ha sido muy beneficioso para las dos, el trabajo de la una, permitió que también se reconociera el de la otra. Ya para este mes de junio, la empleada doméstica, que jamás lo pensó, cuenta con el pago de la prima correspondiente al tiempo trabajado, servicio médico, caja de compensación y ahorro para la pensión, lo cual hace sentir bien a la empleadora porque sabe que está construyendo una sociedad más justa, reconociendo los derechos de los trabajadores domésticos, gracias a la asesoría de SYMPLIFICA.
La empleadora con la asesoría que le ha brindado SYMPLIFICA, les comenta a sus amigas que también tienen empleadas del servicio doméstico que evadir las responsabilidades legales en estos casos, les podría acarrear sanciones y/o multas de hasta 100 SMLV, por no actuar conforme la ley lo establece.
Definitivamente a través de la formalización del contrato laboral se han estrechados los lazos, puesto que además de la motivación por la labor doméstica, con el solo hecho de firmar un contrato, para las dos partes, generó mayor confianza y estabilidad laboral para la empleada, así no trabaje de tiempo completo en el hogar.
Por otro lado, le dio la posibilidad a su empleada de contar con el dinero de las cesantías en caso de que llegase a quedar sin empleo, como también de retirar anticipadamente el dinero para estudio suyo o de sus hijos, así como para comprar de vivienda o hacer arreglos locativos.
Esta historia laboral apenas comienza.
Cada mes la empleadora a través de la aplicación móvil de Symplifica le da los desprendibles de nómina a su empleada con el detalle de todos los demás pagos legales, y ésta firma su recibido a satisfacción como se hace normalmente en una empresa.
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